Nueva información sobre el estado de Michael Schumacher: “En este momento está luchando”
Jean Todt, presidente de la Federación Internacional del Automovil (FIA), aseguró que el ex piloto está vivo gracias al trabajo de los médicos y a la ayuda de su esposa, Corinna Betsch
El 29 de diciembre de 2013, Michael Schumacher esquiaba en la estación alpina de Méribel junto a su familia cuando se golpeó la cabeza contra una roca que le provocó un traumatismo craneoencefálico severo, con hematomas intracraneales y edema cerebral difuso, por lo que un helicóptero tuvo que trasladarlo de urgencia a un centro médico en Grenoble en donde se informó que su estado era crítico. Luego, estuvo en coma inducido por seis meses y desde entonces, y debido a una decisión de su familia, su estado de salud es un misterio.
Algunas personas que acompañaron al ex piloto de Fórmula 1 durante gran parte de su carrera, pero que no son parte de su círculo íntimo, tienen permiso para visitarlo y pese a que tienen prohibido dar detalles sobre cómo se encuentra, muchas veces deslizan algunos datos. En esta ocasión fue Jean Todt, presidente de la Federación Internacional del Automovil (FIA), quien brindó declaraciones que esperanzan a los fans del alemán.
“Gracias al trabajo de los médicos y a la ayuda de Corinna (Betsch), que quería que Michael sobreviviera, éste sobrevivió, pero con consecuencias y en este momento está luchando con estas consecuencias. Esperamos que las cosas mejoren lenta, pero inexorablemente”, comentó en diálogo con el diario alemán Bild.
El francés de 75 años tiene encuentros constantes con Schumacher y defendió a la esposa del piloto, quien se ha encargado de proteger a su marido desde lo ocurrido en Los Alpes: “Desde su accidente de esquí, he pasado mucho tiempo con su esposa Corinna. Es una gran mujer y ahora dirige a la familia. Corinna nunca esperó algo así, pero desgraciadamente ocurrió y no tuvo elección”.
Si bien Todt evitó dar información puntual sobre cómo pasa los días el siete veces campeón de la Fórmula 1, sus declaraciones van en tono con lo que había dicho en diciembre de 2020 al medio Ouest France: “Desde entonces (29 de diciembre de 2013), ha sido tratado para poder volver a una vida más normal”. Ese mismo año, en un artículo publicado por Il Corriere della Sera en vísperas del Gran Premio de Mónaco, había revelado que sus visitas eran constantes: “Veo a Michael al menos dos veces al mes. No lo dejo solo. Él, Corinna, la familia: hemos vivido muchas experiencias juntos. La belleza de lo vivido forma parte de nosotros y continúa”.
En esta oportunidad, el presidente de la FIA también le dedicó unas palabras a Mick, el hijo de Schumi, quien está dando sus primeros pasos en la F1: “Es una de las personas que siempre tendrá un lugar especial en mi corazón y en el de mi esposa, Michelle”.
Si en los buenos tiempos estuvieron unidos, en los malos el directivo francés estuvo todavía más cerca de Schumi, así como también de la familia: “Hoy mi relación con Corinna y los niños también se ha vuelto más cercana. Recuerdo que Michael solía traer a su hijo a Italia antes, luego dormía la mayoría de las veces en mi casa. Hoy Mick es casi un adulto”, recordó en 2018.
Lo último que se conoce de Schumacher es que se encuentra en su hogar en Gland, Suiza. Una mansión a orillas del Lago Geneva que fue reconstruida para mantener con vida al múltiple campeón de mundo. En septiembre 2016, el abogado de la familia, Felix Damm, reveló que el ex corredor no podía caminar y aquella frase fue una de las primeras que aportó algo nuevo desde su accidente.
En agosto de 2018, un familiar que mantuvo el anonimato contó a la revista Paris Match: “Cuando lo pones en su silla de ruedas frente al hermoso panorama de las montañas que miran al lago, Michael a veces llora”. Luego fue el arzobispo Georg Ganswein, quien detalló a la revista Bunte: “Me senté frente a él, lo toqué con ambas manos y lo miré. Su cara, como todos sabemos, es la típica cara de Michael Schumacher; sólo se ha vuelto un poco más rellena”.
En 2019 hubo un gran cambio con respecto a los anteriores años, luego de varios rumores sobre una mudanza, que fueron desmentidos por la familia, un megaoperativo de seguridad alertó a París de que el ex corredor había sido trasladado a un centro clínico de la capital francesa. El alemán de 50 años llegó en una ambulancia al Hospital Georges-Pompidou y entró en una camilla cubierto por una manta azul que tapaba completamente su rostro y su cuerpo, rodeado de una decena de personas que formaban parte del dispositivo de seguridad.
Allí, habría sido atendido por Philippe Menasché, pionero de la terapia celular para curar la insuficiencia cardíaca. Sin embargo, el médico no afirmó haber trabajado directamente sobre Schumi y negó que estuvieran realizando un “experimento” como se había dicho en primera instancia: “Yo no hago milagros. Con mi equipo no estamos haciendo ningún ‘experimento’, término abominable que no se corresponde con una visión sería de la medicina”.
Después de aquel episodio que duró una semana y que acabó con el regreso de Schumacher a su mansión, Corinna Betsch rompió el silencio y le brindó una entrevista a la publicación alemana She’s Mercedes Magazine, en la que dio algunas precisiones sobre el estado actual de salud de su marido. “En este momento está en las mejores manos posibles y nosotros estamos haciendo todo lo posible para ayudarlo. Puede estar seguros de ello”, expresó en diálogo con el medio germano.